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Cuando surgió la idea de utilizar los faros de un automóvil como alumbrado público, surgió inmediatamente la pregunta sobre el poder de dicha iluminación.
El uso de una bombilla de luz de 12 voltios “nativa” demostró ser problemático: ¡el transformador no cabe en el faro! No había ningún deseo de separar la carcasa resistente a la intemperie por separado para esto y conducir de él al faro un cable de gran sección transversal.
La solución a esta situación fue el uso de lámparas halógenas compactas con un voltaje de 220 voltios. A la venta había lámparas con una potencia de 35 y 50 vatios. Escuché acerca de 75 vatios, pero no pude encontrar. Se aplicaron los dos tipos encontrados: funciona correctamente.
Todo lo que quedaba era idear una forma confiable de montarlo en el faro, lo que permite reemplazar una lámpara defectuosa sin ninguna dificultad especial.
Comencemos por "desmontar" una lámpara estándar de 12 voltios para quitar los sujetadores.
La lámpara es una lámpara en sí misma y una "falda" de montaje conectada por soldadura.
Separamos la lámpara de la falda calentando el lugar de soldadura en cualquier equipo disponible, en nuestro caso es una estufa de gas.
Luego cortamos un pedazo de lámina de PCB, lo marcamos de acuerdo con el tamaño de las patas de la bombilla, perforamos, cortamos, soldamos a lo largo del perímetro y al final obtenemos lo siguiente:
La búsqueda de monturas para las patas de la lámpara condujo a un mercado de pulgas. El conector macho 2RM (madre) es perfecto para nuestro propósito.
Intenta, mide, asegúrate de recoger algo.
Insertamos y soldamos los "soportes para las piernas"
Eso es todo: la lámpara está lista para instalarse en el faro
El montaje se ve así:
Autor casero: Ika_tander
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